Hay viajes que no los prevés, que simplemente se cruzan en tu camino cuando menos te lo esperas. Desde hace ya muchos años había soñado con visitar Rusia, y mi sueño se hizo realidad en Abril de este año.
Recuerdo la primera vez que la vi, fue amor a primera vista. Tan inmensa, con ese carácter tan dominante, tan elegante y a la vez tan decadente. Y de esta manera me rendí a sus pies. San Petersburgo, mi ciudad soñada.
San Petersburgo, fundada por el zar Pedro I el Grande en 1703, es considerada una de las ciudades más bellas de Europa y Asia. Es la segunda metrópoli de Rusia después de Moscú y cuenta con más de cinco millones de habitantes. Aunque yo la visité en Abril, dicen que la mejor época para visitarla es junio, durante las llamadas Noches Blancas, ya que el sol no desaparece en toda la noche, pero también el invierno tiene su encanto, os lo aseguro.
San Petersburgo es también llamada la Venecia del Norte debido a los innumerables canales, islas y puentes que fue necesario construir para drenar el terreno y encauzar el caudaloso río Nevá.
Nada más llegar a la antigua capital imperial rusa, lo primero que hice para tomar contacto fue dar una vuelta por la gran avenida Nevski, la principal arteria de la ciudad. Está siempre llena de gente, da lo mismo la hora que sea o la temperatura que haga. Si la recorres toda entera desde la estación de ferrocarril de Moscú, atravesarás los principales canales Fontanka, Griboyédov y Moika hasta llegar al río Nevá.
Como os imaginaréis, lo que yo hice fue callejear todo lo que pude, y hoy os dejo un pequeño resumen fotográfico, de lo que fue para mí, recorrer esta ciudad de cuento.
Será posible!! Tan cerca de Finlandia y no te atreviste a dar el salto 😛
Viendo tus fotos, hay que reconocer que San Petersburgo también tiene su encanto. Sin duda, lo que más me llama la atención es esa cafetería móvil. Sobre todo las puertas abiertas de par en par. No son peligrosas para el tráfico? Al menos esa es la sensación que me da en la foto.
Saludos!
Hola Pablo, que sepas que recién estoy viendo los comentarios del blog… ¡menudo desastre! Pues la verdad es que las calles y aceras son tan anchas que no hay problema, aunque obviamente podrían hacerlo mejor. Espero que algún día tengas la oportunidad de visitar esta ciudad porque es una maravilla 🙂 Un abrazo grande y gracias por pasarte por aquí.